sábado, 17 de diciembre de 2011

"El café y el azúcar tienen los mismos efectos en el cerebro que drogas como la heroína"

Gary Wenk experto de la Universidad de Ohio, EE.UU., y autor del libro “Tu cerebro bajo los efectos de los alimentos”, explica por qué la carne o un helado mejoran el estado de ánimo.

http://cosillasmedicas.blogspot.com/2011/12/cafe-y-el-azucar-tienen-los-mismos.html

"La aplicación de este estudio va a cambiar al mundo” - Una inyección para la supermemoria

El uruguayo Mauro Costa-Mattioli (Ph.D., University of Nantes, France, 2002)descubrió que la memoria de los ratones crece al inhibir una molécula, lo que promete ser revolucionario en humanos



"La aplicación de este estudio va a cambiar al mundo”, dijo el investigador uruguayo Mauro Costa-Mattioli por teléfono, desde el laboratorio que dirige en el Baylor College of Medicine de Texas, Estados Unidos. Y aunque su afirmación suene exagerada, no lo es.

El descubrimiento que Costa-Mattioli publicó como principal responsable el jueves pasado en la revista especializada Cell, podría solucionar con una simple inyección o una pastilla el problema de pérdida de memoria que tienen las personas con alzhéimer y otras enfermedades neurodegenerativas. También podría mejorar la capacidad de aprendizaje e, incluso, ayudar a sustituir los malos recuerdos.

Todo esto se lograría gracias a una molécula llamada PKR, o mejor dicho, gracias a su ausencia. Mediante el trabajo con ratones, los investigadores hallaron que cuando se inhibe esta molécula, aumenta la actividad cerebral y, en consecuencia, genera un incremento en la memoria y la capacidad de aprendizaje.

Estos ratones con supermemoria fueron generados de dos formas. Por un lado, mediante la alteración de su genoma, es decir, creando animales transgénicos que nacieran ya sin PKR. Y, por otra parte, inyectándoles  a animales normales una droga que bloquea las funciones de dicha molécula.

Como resultado, los ratones lograron reaccionar más rápido ante algo que antes les había provocado miedo y se orientaron con mayor agilidad en un determinado espacio. Por ejemplo, el camino que a los ratones “normales” les llevaba varias pasadas memorizar, ellos lo aprendían en un solo recorrido.

“Nosotros aprendemos por repetición, eso es lo que excita las neuronas”, explicó Costa-Mattioli. La ausencia de la molécula PKR generaría de por sí una sobreexcitación de las células del cerebro que llevaría a acortar los tiempos de aprendizaje y a prolongar la memoria.

De igual forma, al no funcionar esta molécula, sería más fácil “generar una memoria buena arriba de otra mala”, dijo el investigador de 36 años nacido en Tala. Esto sería particularmente importante en casos como de soldados con stress post traumático, ejemplificó.

La PKR no fue descubierta por los científicos del Baylor College of Medicine, sino que solo se conocía su rol inmunológico, como protectora contra enfermedades virales.

A los avances alcanzados hasta el momento en ratones, ahora deberán seguirles los estudios clínicos en humanos y el desarrollo de un producto para vender en el mercado como inyectable o pastilla. Por lo pronto, Costa-Mattioli, que lleva 10 años investigando en neurociencias, se consideró satisfecho con estos logros y afirmó: “Lo prometido se ha vuelto realidad”.

Genios epilépticos

Los ratones a los que se les inhibe la molécula PKR genéticamente o a través de una inyección en la panza se ven normales, pero observados a través de un electroencéfalograma, sus neuronas están sobreexcitadas. Es como si estuvieran teniendo un ataque de epilepsia, pero sin las convulsiones. Según explicó Costa-Mattioli, existe una impresión negativa de la palabra seizure (“convulsión”), cuando en realidad el término designa un grupo de neuronas que están siendo excitadas de forma sincronizada. Grandes genios de la historia como Fiódor Dostoyevski y Leonardo Da Vinci desarrollaron epilepsia en sus vidas, por lo que “quizás este estudio se acercaría al hallazgo de un gen de la inteligencia”, dijo el investigador.

http://www.observador.com.uy/noticia/214956/una-inyeccion-para-la-supermemoria/


Cómo funciona la memoria
Costa-Mattioli explicó a Tecno que la "Memoria, o capacidad de recordar información, es el proceso por el cual el conocimiento es codifificado, guardado y más tarde recordado. Según cómo se la guarde y se recuerde la información la memoria puede ser dividida en Explícita e Implícita. Memorias explícitas son memorias de eventos que ocurrieron en el mundo externo. La información guardada de una manera explícita es aquella asociada a eventos específicos que ocurrieron en un tiempo y lugar determinado. De esta manera, las asociaciones son creadas con estímulos y experiencias previas y la memoria puede ser recordada. En particular este tipo de memoria depende del lobo temporal. Las memorias implícitas son necesarias para llevar a cabo eventos, tareas o producir un tipo especifico de memoria. La memoria implícita es activa cuando el funcionamiento para llevar a cabo una tarea es mejorado. Este tipo de memoria ocurre a través de la activación de los sistemas motores y sensitivos necesarios para llevar acabo una tarea determinada. Estudios en memoria y neuroplasticidad apoyan la hipótesis de que la consolidación de la memoria a largo plazo es dependiente del tiempo. Dos tipos de memorias pueden ser definidas: a) memorias a corto plazo, estas no requieren la expresión de genes y generalmente duran corto tiempo (segundos, minutos) y b) memorias a largo plazo que duran más tiempo (horas, días, años), requieren la expresión génica y conexiones sinápticas persistentes".

http://www.elpais.com.uy/suple/tecno/07/05/18/sptecno_281417.asp


martes, 6 de diciembre de 2011

El pescado no frito podría proteger del Alzheimer, según un estudio

Comer pescado horneado o asado aunque solo sea una vez por semana podría fomentar la salud del cerebro y reducir el riesgo de deterioro cognitivo leve y enfermedad de Alzheimer, sugiere una investigación reciente con escáneres cerebrales.

Los autores del estudio hallaron que comer pescado horneado y asado (pero no frito) ayuda a preservar las neuronas de la materia gris, fortaleciéndolas en áreas del cerebro que se consideran esenciales para la memoria y la cognición.

"Los que comían pescado horneado o asado tenían cerebros más grandes", anotó el autor del estudio, el Dr. Cyrus Raji, residente del departamento de medicina del Centro Médico de la Universidad de Pittsburgh en el Hospital Mercy. "Tenían neuronas más grandes en áreas del cerebro responsables de la memoria y el aprendizaje. Y el motivo de que sea importante es que esas áreas cerebrales están en alto riesgo de enfermedad de Alzheimer".

En las personas con un mayor volumen cerebral, "el riesgo de Alzheimer y deterioro cognitivo leve se redujo cinco veces en cinco años tras los escáneres cerebrales", dijo.

Raji dijo que se sintió "sorprendido" de que este efecto se observara a partir de comer pescado apenas entre una y cuatro veces por semana. "Hablamos de apenas media porción al día", dijo. "Y ese sería un cambio muy pequeño en el estilo de vida que puede afectar el riesgo de enfermedad durante mucho tiempo".

Raji y colegas presentaron los hallazgos el miércoles en la reunión anual de la Sociedad Radiológica de América del Norte (Radiological Society of North America, RSNA), en Chicago.

Más de cinco millones de estadounidenses sufren de Alzheimer, un trastorno incurable relacionado con la edad que destruye lentamente las habilidades de memoria, pensamiento y lenguaje. Los adultos mayores con deterioro cognitivo leve tienen una pérdida de memoria menos grave que los que sufren de Alzheimer, pero con frecuencia terminan desarrollando esa enfermedad.

Para evaluar el impacto del pescado sobre la salud cognitiva, los autores se enfocaron en 260 individuos mayores mentalmente sanos provenientes del Estudio de salud cardiovascular, patrocinado por el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de EE. UU.

Todos los participantes se sometieron a IRM tridimensionales para que los investigadores pudieran hacer un mapa del tamaño de la materia gris de cada individuo y darle seguimiento durante diez años. También completaron el Cuestionario de frecuencia alimentaria del Instituto Nacional del Cáncer de EE. UU.

Entonces, el equipo comparó los cambios en la materia gris con el consumo dietético según se reportó en el cuestionario.

Los cuestionarios revelaron que 163 de los participantes del estudio comían pescado al menos una vez por semana, y la mayoría consumían pescado entre una y cuatro veces por semana.

Con esa información, los autores hallaron que independientemente de la edad, el sexo, las rutinas de actividad física y/o los logros educativos, la raza o el peso, los que comían pescado horneado o asado tenían una masa más grande en el hipocampo, el precúneo, y las regiones de las cortezas posterior cingulada y frontal orbital de sus cerebros.

El equipo también observó que las personas que comían pescado horneado o asado semanalmente presentaban una mejor "memoria de trabajo", lo que les permitía ejecutar las tareas de rutina con mayor eficacia.

Pero los amantes del pescado frito con papas deben tener cuidado. No hubo un beneficio craneano evidente respecto al consumo de pescado frito.

El equipo advirtió que aunque comer pescado horneado y asado parece ejercer cierto beneficio cognitivo, otros factores del estilo de vida y socioeconómicos podrían tener que ver. Por ahora, la conexión debe ser considerada como una asociación, en lugar de causa y efecto.

El Dr. Richard Lipton, vicepresidente de neurología del Colegio de Medicina Albert Einstein de la ciudad de Nueva York, reiteró ese punto.

"Hay que preguntarse si hay factores asociados con el consumo de pescado que no midieron que podrían resultar protectores", planteó. "Quizás las personas que comen pescado hagan más ejercicio, o coman menos calorías en total. O tal vez coman más componentes de una dieta mediterránea, como frutas y verduras".

Lipton añadió que "este grupo de investigadores es realmente bueno", y afirmó que los resultados del estudio son "un hallazgo muy interesante, y que absolutamente amerita más exploración".

Las investigaciones presentadas en reuniones científicas se deben considerar preliminares hasta que se publiquen en una revista médica revisada por profesionales.


Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare

FUENTES: Cyrus Raji, M.D., Ph.D., resident, department of medicine, University of Pittsburgh Medical Center, Mercy Hospital, and University of Pittsburgh School of Medicine; Richard Lipton, M.D., professor, vice chair, neurology, Albert Einstein College of Medicine, New York City; Nov. 30, 2011, presentation, Radiological Society of North America annual meeting, Chicago



Unos escáneres podrían diferenciar entre dos tipos de demencia

En la gran mayoría de casos, los investigadores pueden distinguir el Alzheimer y otra forma de demencia con síntomas similares usando un tipo específico de escáner TEP que busca evidencia de placa en el cerebro, sugiere una investigación reciente.

Conocido como el escáner "PIB PET" (por su sigla en inglés), este tipo de escáner parece ser más preciso para diferenciar entre los dos tipos de demencia que el escáner de uso más común, el "FDG PET".

"Estos dos tipos de demencia comparten síntomas similares, así que diferenciarlas mientras una persona sigue con vida es un verdadero desafío, pero es importante para que los médicos puedan determinar la mejor forma de tratamiento", explicó en un comunicado de prensa de la Universidad de California el autor del estudio, el Dr. Gil Rabinovici, del Centro San Francisco de la Memoria y el Envejecimiento de la universidad.

El estudio aparece en la edición en línea del 30 de noviembre de la revista Neurology.

El escáner PIB PET aprovecha un "marcador PIB" para descubrir señales de placa cerebral (conocida como amiloidea). La presencia de esa placa es una señal característica del Alzheimer, pero no es una señal de otro tipo de demencia llamada degeneración del lóbulo frontotemporal (DLFT).

En la DLFT, los lóbulos frontal y temporal del cerebro se atrofian. Es menos común que el Alzheimer, pero igual de devastadora. Las personas que sufren de DLFT pueden desarrollar conducta errática, problemas emocionales, problemas para comunicarse y dificultades para caminar y otros movimientos básicos.

Para medir la eficacia de los escáneres PIB PET, el equipo se enfocó en 107 pacientes que tenían Alzheimer de inicio temprano o DLFT.

Todos los pacientes se sometieron tanto a un escáner PIB PET como a un FDG PET. Éste último busca señales de cambios metabólicos en el cerebro.

Mientras se halló que el escáner FDG PET diferenciaba con precisión entre ambas formas de demencia casi el 78 por ciento de las veces, los escáneres PIB PET lo lograron casi 90 por ciento de las veces.

Aunque el estudio halló que el FDG PET resultó en menos falsos positivos en situaciones selectas, en general el PIB PET pareció tener un mejor rendimiento.

"Aunque el uso generalizado del escáner PIB PET no está disponible en este momento, los marcadores amiloideos similares se están desarrollando para el uso clínico, y esos hallazgos respaldan un rol para las imágenes de la amiloidea en el diagnóstico correcto de la enfermedad de Alzheimer frente a la DLFT", anotó Rabinovici.

Catherine Roe, profesora asistente de neurología del Centro de Investigación Knight de la Enfermedad de Alzheimer en la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en San Luis, dijo que aplicar la tecnología actual PIB PET es poco práctico fuera de instituciones especializadas de investigación. Pero, anotó, eso está a punto de cambiar.

"Los autores tienen razón al decir que la nueva tecnología que marca la amiloidea que se está desarrollando ahora mismo será más fácil de usar en un ámbito clínico", afirmó. "Se están realizando pruebas. Así que según sus hallazgos, su respaldo del uso de este tipo de escáner realmente tiene mucho sentido para mí. Porque una sensibilidad de 90 en la identificación correcta de la enfermedad es mucho mejor que de 78".


Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare

FUENTES: Catherine Roe, assistant professor, neurology, Knight Alzheimer's Disease Research Center, Washington University School of Medicine, St. Louis; American Academy of Neurology, news release, Nov. 30, 2011



jueves, 1 de diciembre de 2011

****** Estimulación profunda del cerebro "revierte" Alzheimer ++++

Utilizando una técnica conocida como estimulación profunda del cerebro, científicos canadienses plantean una posibilidad ambiciosa: lograr revertir los estragos del mal de Alzheimer.

Siempre se ha pensado que el encogimiento del cerebro, la declinación de sus funciones y la pérdida de memoria eran fenómenos irreversibles.

Sin embargo, los científicos canadienses decidieron utilizar la técnica de estimulación cerebral profunda, que consiste en la aplicación directa de electricidad a las regiones cerebrales.

En dos pacientes, el centro de la memoria del cerebro detuvo su prevista declinación y, de hecho, creció.

La estimulación cerebral profunda ha sido utilizada en decenas de miles de pacientes de Parkinson, así como en otros que padecen depresión o del síndrome de Tourette.

Lo que no se sabe es cómo funciona.

El procedimiento se realiza bajo anestesia local. Una imagen de resonancia magnética identifica el objetivo dentro del cerebro.

Se fija la cabeza en una posición, se deja al descubierto una pequeña región del cerebro y se colocan pequeños electrodos cerca de la región del cerebro que se desea estimular.

Los electrodos se conectan a una batería que se implanta bajo la piel, próxima a la clavícula.

El profesor John Stein, de la Universidad de Oxford, dice: "Mucha gente diría que no sabemos por qué funciona."

Su teoría es que, en el mal de Parkinson, las células cerebrales se ven atrapadas en un patrón de reventones eléctricos, seguidos de silencios, luego estallidos, después silencios.

La estimulación de alta frecuencia continua viene a interrumpir este patrón. Sin embargo, Stein acepta que "no todo el mundo concordará con esta explicación."

Misterio

El cómo puede la estimulación cerebral jugar un papel en el Alzheimer es aún un misterio mayor.

En el Alzheimer, el hipocampo es una de las primera regiones que se encoge. Se trata del centro de la memoria que convierte la memoria de corto plazo en memoria de largo plazo.

Su daño conduce a los primeros síntomas del Alzheimer, pérdida de la memoria y desorientación.

En sus últimas etapas del Alzheimer, las células del cerebro están muertas o moribundas en la totalidad del órgano.

El estudio de la Universidad de Toronto trabajó con seis pacientes con la enfermedad. La estimulación cerebral profunda fue aplicada al arco cerebral, o fornix, una parte del cerebro que transmite mensajes al hipocampo.

El investigador jefe, el profesor Andrés Lozano, dice que lo normal es un encogimiento previsible del hipocampo de un 5% al año, como promedio, en los pacientes de Alzheimer.

Después de 12 meses de estimulación, afirma que un paciente experimentó un 5% de aumento mientras que otro tuvo un aumento de 8%.

"Nunca habían visto crecer el hipocampo, en ninguna circunstancia. Es un increíble descubrimiento para nosotros"
Profesor Andrés Lozano, investigador en jefe

 

"¿Cuán grande es un 8%? Enorme. Nunca habían visto crecer el hipocampo, en ninguna circunstancia. Es un increíble descubrimiento para nosotros," le dice a la BBC.

"Se trata de la primera vez que la estimulación del cerebro en un ser humano produce probadas formas de crecimiento en un área del cerebro."

En cuanto a síntomas, el doctor Lozano dice: "uno de los pacientes, se encuentra mejor tras un año de estimulación, de manera que se puede decir que su Alzheimer ha retrocedido."

Etapa inicial

Los hallazgos fueron presentados ante la conferencia de la Sociedad para la Neurociencia, en noviembre, pero están por publicarse en alguna revista científica.

Según Lozano, los experimentos en animales probaron que este tipo de estimulación es capaz de crear nuevas células nerviosas.

Por su parte, el profesor Stein dice sentirse "muy alentado" por estos primeros descubrimientos, pero que la demostración clave está en demostrar "que hubo un mejoramiento en la memoria."

La doctora Marie Janson, de Alzherimer's Research UK, dijo que "sería muy significativo" si se pudiera revertir el encogimiento del cerebro y que "si se pudiera demorar el comienzo del Alzheimer en unos cinco años, se reduciría la gente afectada por el mal a la mitad."

Para determinar si se trata de un hallazgo real o de un resultado erróneo, los investigadores se disponen a llevar a cabo un estudio mayor.

Lozano dice que, por el momento, "hay que proceder con cautela, todo esto está en su estapa inicial y los pacientes involucrados son un número muy pequeño."

A partir de abril, el grupo investigador apunta a trabajar con 50 pacientes con un Alzheimer medio. A todos se les implantarán los electrodos, pero sólo la mitad de ellos los tendrá activados.

Los investigadores podrán verificar, entonces, si hay alguna diferencia en el hipocampo entre ambos grupos.

El gupo examinará específicamente a pacientes con Alzheimer medio debido a que, de los seis pacientes con el mal, sólo mejoraron los dos con los síntomas más suaves.

Una teoría que está en consideración es que, pasado un cierto nivel de daño, los pacientes entran en un estado de irrecuperabilidad.


Fuente: BBC Salud